A 50 años del primer título

“En los comienzos de la década del 60 el Club tenía 16 años de fundado y contaba con alrededor de 250 socios, de los cuales jugaban 200 o menos. (…) Los Tilos jugaba y se entrenaba en el Colegio Nacional y nos cambiábamos en el subsuelo del “Partenón” en donde había vestuarios.” Lisandro Gordillo, integrante de aquél equipo que consiguió el primer campeonato para el club, recuerda orgulloso aquellos años como un momento de crecimiento institucional y deportivo que marcaría a fuego la identidad del Club de Rugby Los Tilos.

“Los entrenamientos eran a la tardecita o noche. Cuando ya no se veía nada, con una larga caña se subían dos cables pelados que se enganchaban con el chisporroteo consiguiente a la línea general. Así se conseguía que se prendieran dos faroles, que daban un radio de aproximadamente 50 o 60 metros de luz.”

Históricamente nunca nada resultó fácil para el club, y todo se consiguió en base al esfuerzo y sacrificio de cada socio y jugador. Y en aquellos tiempos, los primeros de una rica historia que en enero último cumplió 70 años de vida, no fue la excepción. Lisandro revive en su relato lo que para él fue una contingencia deportiva sin precedentes para el rugby de Buenos Aires. “En toda la UAR (el campeonato) generó conmoción. Que un equipo de Segunda División, sin ningún tipo de antecedente deportivo valioso, sacara nada menos que la Reserva Campeona era impensable, inédito y hasta incómodo para muchos capitostes de la Unión, que formaban el Seleccionado Argentino en base a apellidos y no a capacidad deportiva.”

“En la Zona de Clasificación perdimos un solo partido con Belgrano, que no nos impidió clasificar primeros. Ganamos todos los partidos y en el último, ya habiendo clasificado primeros, Alberto (Gómez Cabrera) hizo entrar a todos los suplentes y algunos chicos de Cuarta División. Perdimos, pero poco importaba. (…) La final la jugamos contra Liceo Naval en cancha de GEBA, que era como decir ahora, River. Fuimos preliminar de los que al año siguiente se convertirían en Los Pumas, que jugaron contra el seleccionado de Oxford-Cambridge. De más está decir que ganamos cómodos y no los goleamos porque, se quiera o no, era una final.”

Lisandro recuerda que hasta la llegada de la “Macha” Gómez Cabrera, el plantel estaba a la deriva. “La División Superior estaba conformada por un grupo de jugadores totalmente heterogéneo. Algunos con grandes condiciones, poco explotadas, y otros que no tenían muy en claro para qué jugaban.” Las ideas revolucionarias de Jorge Cáceres (padre) y de Alberto Gómez Cabrera revirtieron rápidamente esa situación: “disciplina deportiva, comportamiento adecuado dentro y fuera de la cancha, y comienzo de reuniones con los entrenadores de las divisiones inferiores.”

“Jugar al rugby divirtiéndose, pero con disciplina, comportamiento ejemplar y responsabilidad. Eso podría ser un resumen de lo que pretendían los que tenían la responsabilidad de la conducción. Consiguieron cambiarle la cara al Club, pero con el mérito de no perder la esencia ni renegar de su historia. Estoy convencido que lograron lo que se propusieron. No solamente por haber conseguido el título de la Reserva, sino porque a los dos años teníamos a Los Tilos por primera vez en Primera División, por muchos años y con otra "impronta" de Club.”

Rubén Albizuri, Carlos Axat, Héctor Castilla, Florencio Cicale, Carlos De Cucco, Ricardo Dente, Andres Ellion, Alberto Foulkes, Eduardo Gómez, Lisandro Gordillo, Martín Guichón, Julio Husson, Néstor Ivanec, Gustavo Lambre (capitán), Enrique Lima, Enrique López Osornio, Mariano Loza Colomer, Roberto Marturet, Héctor Méndez, Juan Merbilhaa, Norberto Morro, Miguel Uliana, Carlos Zabaleta e Isidro Zoroza, fueron algunos de los integrantes de aquél plantel, junto a los siguientes jugadores de 4ta. y 5ta. División, que actuaron en una oportunidad: José Casajús, Daniel Elicabe, Ianus Mielnicky, Augusto Castilla, Carlos Iribarren, Miguel Ángel Viñuela, Héctor Goitia, Rodolfo Mariani y José Mogilner. El entrenador fue Alberto “Macha” Gómez Cabrera y el preparador físico Carlos Cancela.